Quizás ya hayas oído hablar del edamame o a lo mejor lo has comido sin saber exactamente qué era, porque es un aperitivo habitual en los restaurantes de cocina asiática y cada vez más en presente todo tipo de establecimientos de hostelería.
El edamame es la soja verde que está todavía dentro de la vaina. Hay referencias a este alimento desde el siglo XIII y, aunque ha tardado en extenderse desde Asia hasta el resto del mundo, su popularidad ha aumentado de manera exponencial en los últimos años. Hasta hace poco era muy difícil de encontrarlo más allá de restaurantes y tiendas de importación, pero desde que está disponible en los supermercados tradicionales, la afición por el edamame crece sin parar.
¿Por qué gusta tanto el edamame?
- En primer lugar, porque es muy sencillo de cocinar, ya que se cuece en pocos minutos.
- En segundo lugar, por ser tan fácil de comer y adictivo como las pipas: sólo tienes que presionar la vaina y el haba de soja saldrá.
- Tercero: ¡están buenísimos!
- Y, por último, porque es un alimento muy nutritivo, ya que aporta mucha fibra, es bajo en calorías y aportan proteínas vegetales, hierro, calcio, fósforo y vitaminas como la K, B9 o C.
En Asia es un snack popular en los bares y se sirve, haciendo un símil, como en España se sirven las aceitunas o los altramuces: para acompañar bebidas. No obstante, tiene muchos otros usos y sólo recientemente está empezando a entrar en las despensas de nuestro país.
Aceite de oliva español, el mejor compañero del edamame
Ya que el edamame tiene tantas propiedades saludables, ¿por qué no complementarlo con otro ingrediente incluso más especial? El aceite de oliva de España es un acompañante perfecto para casi cualquier alimento, y el edamame no es menos.
Con altos niveles de ácido oleico y sustancias antioxidantes como los polifenoles y la vitamina E, el AOVE, además de estar delicioso, te aporta grasas insaturadas que ayudan a mejorar los niveles de colesterol, previenen la diabetes, la diabetes gestacional y las enfermedades relacionadas con la obesidad, según ha demostrado el Estudio PREDIMED. El aceite de oliva español es sinónimo de salud y bienestar.
Diferentes formas de cocinar edamame
Todas las propiedades del edamame, sumadas a las del AOVE, los convierten en un equipo casi invencible. Descubre cómo cocinar edamame y verás que es un ingrediente genial para preparar platos y aperitivos.
- Edamame aliñado: con los edamame cocidos y sin vaina, un aliño clásico con aceite de oliva virgen extra de España y un poco de pimentón, tendrás una ensalada rápida y sorprendente.
- Hummus de edamame: siguiendo la receta de hummus y sustituyendo el garbanzo (o una mitad) por edamame, tendrás un fantástico y sanísimo aperitivo para servir en tus cenas con amigos o reuniones familiares.
- Cremas de verduras: unos gramos de edamame en esta receta de crema de brócoli o en esta crema fría de aguacate con chips de batata, sorprenderán a los comensales, ¡garantizado!
- Poke: ¿qué sería del poke sin el edamame? Uno de los platos más de moda en todo el mundo tiene el edamame como uno de sus ingredientes básicos porque combina a la perfección con el arroz, las verduras frescas y un aliño con AOVE.
- Edamame crujiente al horno: tuesta en un horno, como si fueran frutos secos, las habas de edamame previamente cocidas. Un puñado de tus especias favoritas, un chorrito de AOVE, y ya tienes un snack delicioso y original. También puedes usarlos en tus ensaladas o incluso añadirlos sobre una crema de verduras justo antes de comer, para conseguir una textura crujiente.
- Salteado de edamame: saltea los edamame con aceite de oliva español, jengibre y un poco de salsa de soja, ¡están buenísimos!.
Anímate a cocinar edamame con alguna de estas ideas, estamos seguros de que te encantará y de que se convertirá en un ingrediente habitual en tu cocina.
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